jueves, 1 de noviembre de 2007

Vísperas del día de difuntos

En vísperas del día de todos los santos [católicos], la Iglesia de Roma beatifica a más de tres centenares de curas asesinados por el bando republicano durante la Guerra Civil española. Con su política sesgada y sectaria, la Iglesia ha olvidado a los curas asesinados por los franquistas, porque «nadie pidió por ellos», según dijo un obispo [¿macho de la avispa?] que también reza por el Rey. Me pregunto si mañana, cuando se beatifique al cura Christian von Wernich, condenado en Argentina a cadena perpetua, por su implicación en torturas y asesinatos cometidos por la dictadura de ese país, alguien se acordará de pedir por la santificación de monseñor Enrique Angelelli, obispo de la Rioja, y por otros curas asesinados por los militares.


Hoy el día ha amanecido diáfano, la temperatura es agradable y un perfume de castañas asadas impregna el aire. Sin embargo, hay en las calles un silencio hondo, como si en el día de los santos todos los muertos nos hicieran sentir su inolvidada ausencia. [Ilust. distorsión gráfica de Don Quijote, José Guadalupe Posada].

LIBERTAD Y RESPONSABILIDAD

El confinamiento obligado por la pandemia que azota al mundo obliga más que nunca a apelar a la responsabilidad. Los medios de comunicación...